PENSANDO EN LO QUE VIENE
Milei la tiene clara. Mientras sueña con un premio Nóbel, siendo el primer economista en candidatearse, mira con cierta preocupación a las elecciones del año que viene. No es casual que intente hacer votar a los niños ni que anuncie con marcada anticipación un acuerdo con el PRO. El presidente sabe que aún conserva un importante apoyo de la ciudadanía, pero también sabe que su mantenimiento depende no sólo de bajar la inflación sino que la gente viva mejor. Y por ahora eso está lejos de producirse. Lo bueno para Milei es la falta de rivales de fuste, pero como apareció él, pueden venir otros que hoy no están en agenda.
En la semana el principal conflicto fue interno. La vice presidente, Victoria Villaruel modificó la lista de ascensos que mandó el presidente para las fuerzas armadas, sin consultar a nadie. Una “vendetta” de la vice al serle negada influencia en Defensa y Seguridad.
No le fue bien a Caputo en su reunión del lunes con los bancos. Su estrategia fue similar a la efectuada con las energéticas, que recibieron del ministro una quita no esperada. Pero los bancos son más realistas y lo primero que se detectó fue una importante suba del blue, un aumento del riesgo país y una feroz crítica a la devaluación mensual del 2% más el mantenimiento del cepo cambiario. Pese a lo expuesto, a posteriori volvió a negociar y los bancos terminaron aceptando a regañadientes. Los mercados mejoraron. Caputo pensó en el peor momento de la discusión: “les hablé con el corazón y me contestaron con el bolsillo”, haciendo recordar la histórica frase del ex ministro Pugliese. Otra versión sostiene que los bancos tenían media palabra sobre una devaluación del 10% y un mayor ajuste mensual en el tipo de cambio oficial. Las “malas lenguas” sostienen que Santiago Caputo lo paró por orden superior.
En la Bolsa, seguimos mirando eventuales “perlitas”. Muy firme cotiza Molinos Agro luego de anunciar un cambio en el paquete accionario en el grupo Pérez Companc.
Volvieron las energéticas. Se las ve nuevamente demandadas a YPF y a Pampa Energía. A Central Puerto y Central Costanera también se las ve firmes.
La Autopista del Oeste también podría considerarse “perlita”. Gran dividendo, excelente ganancia y una tarifa que satisface.
Héctor Tavares
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